La ignorancia y la indiferencia se mueven como un depredador invisible, una bestia silenciosa que se infiltra y se alimenta de la clase social más vulnerables, para después dejarlos atrapados en la oscuridad de un abismo profundo, con pocas esperanzas de salir.

A la sombra de campañas políticas, rodeados de pancartas contaminantes estas fotografías muestran el contraste brutal entre la pobreza y la ilusión de un cambio que nunca llega. Como mencionaba Eduardo Galeano: «La caridad es humillante porque se ejerce verticalmente y desde arriba; la solidaridad es horizontal e implica respeto mutuo.» Sin embargo, en este contexto, ni la caridad ni la solidaridad son reales. Lo que existe es la explotación de la esperanza.

En las sombras de la sociedad, hay un depredador silencioso que acecha sin rostro ni nombre: la ignorancia.

Invisibilidad fue un proyecto que realicé en mi Certificación Fotográfica Profesional en una de las clases impartidas por de Fotógrafo español Antonio Pérez.